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Testimonios
 
Luis Guillermo y Fernando en el Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible

Por: Liliana Gaona
11 de junio 2013

El Proyecto de Ganadería Sostenible, impulsado por Fedegán-FNG en alianza con el Banco Mundial, el Fondo para el Medio Ambiente Global – GEF (por sus siglas en inglés) el Fondo para la Acción Ambiental y la Niñez, The Nature Conservancy (TNC) y Cipav, ya inició su operación en 12 departamentos del país con más de 2.000 ganaderos participantes. El proyecto busca que la actividad ganadera contribuya al cuidado, conservación y recuperación del medio ambiente, a la vez que se generan mayores ganancias en la producción ganadera. El Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible ha unido esfuerzos para brindar asistencia técnica a los ganaderos diferentes regiones del país, y pagos por servicios ambientales, lo cual se convierte en un incentivo para los ganaderos que han conservado sus bosques.
 

Luis Guillermo Acosta es uno de los ganaderos que se ha beneficiado de este proyecto. Después de 25 años de docencia, decidió que era el momento de buscar otras alternativas de ingreso.

Luis Guillermo. “La verdad es que el ingreso ha sido muy bonito, muy satisfactorio, yo cada día me enamoro más de las tierras, del ganado, de toda la actividad ganadera, tanto que no pierdo tiempo, yo salgo de mi actividad como docente y al los 15 ó 20 minutos estoy metido en la finca, caminando, masajeando el ganado, mirando los potreros, mirando los trabajos que hay que hacer, o sea, encuentro que la actividad es una actividad que no sólo es productiva sino que divertida, acogedora, relajante”.

Don Luis Guillermo se ha convertido en un líder de la región aprovechando sus nuevos conocimientos, ha tomado conciencia de la necesidad de modernizar la actividad ganadera y experimentar nuevas técnicas para aumentar la productividad y la rentabilidad, al igual que las oportunidades de conocimiento y desarrollo. Su amor por el medio ambiente lo impulsó a entrar en el Proyecto de Ganadería Sostenible, no quería dejar ni un solo potrero desprotegido de pastos y forrajes, con el fin de evitar los problemas que se padecen por la falta de agua y de alimento verde para sus animales durante los intensos veranos que afectan la región. Su finca ha cambiado tanto que sus vecinos y compañeros de actividad han empezado a visitarlo para que les enseñe los terrenos y compartir sus experiencias.

A los ganaderos que participan  en el Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible, se les enseña a implementar en sus fincas los sistemas silvopastoriles, a conservar el ambiente y valorar la biodivesidad. Los asesores convocan a los ganaderos para mostrarles sobre terrenos ya establecidos los cultivos y su manera de explotarlos, de esta manera, los ganaderos aprenden de las experiencias demostradas en otras fincas y se intercambian conocimientos.

Continuando con los métodos de cultivo naturales, en las fincas se trabaja con abono natural, se recoge la boñiga y luego se distribuye homogéneamente en todos los potreros, de esta manera se abona sin contaminar y, de paso, los ganaderos logran hacer un ahorro, lo que les permite invertir en otras necesidades. El proyecto también prevé que paulatinamente se vayan disminuyendo las áreas utilizadas en la ganadería al implementar los cultivos silvopastoriles y se destinen más áreas para la conservación de los ecosistemas.
 

Fernando Vence es otro ganadero que ha  decidido participar en este importante proyecto, para él, la paz va de la mano de proyectos que brinden espacios para la reconciliación y mejoren las condiciones de los habitantes del campo colombiano.

Fernando Vence. “Yo creo que este programa cubre tanto la ganadería como la ecología es de gran importancia, no solo para el gremio ganadero sino para nuestro departamento y nuestra nación, porque el futuro de los pueblos no solamente va a ser el desarrollo sino que hay conflictos internos a través de la violencia que se acaban es abriendo estos espacios para que el agricultor, el ganadero, el campesino y el colombiano”.
 
Sistemas silvopastoriles: la clave es cambiar de mentalidad
 
Por: Luisa Gómez Rodríguez
15 de Abril 2013
 

Dice que la idea surgió en el círculo de excelencia que hay en el municipio. Escuchó la voz de expertos para empezar la renovación del predio.
Fotos: Alejandro Avendaño y Alejandra Salas.

Alba Tamayo vive en San Pedro de Los Milagros, Antioquia. Entender la importancia de producir oxígeno con árboles se convirtió en la curiosidad que ella y su esposo empezaron a resolver desde 2010. Esta es la historia de una inusitada transformación ambiental ocurrida en un predio de 18 hectáreas.

“Si pregunta por la inversión económica diré que no es lo más importante. Se trata de hacer un esfuerzo mental, de tener una cultura ambiental y saber que con nosotros también hay otros seres humanos”, asegura Alba Lucía Tamayo, ganadera y copropietaria de ‘El Balcón’, en Antioquia. (Lea ‘Sistemas silvopastoriles en Amazonas, una alternativa sostenible del uso de la tierra’)

Dice que la idea surgió en el círculo de excelencia que hay en el municipio y fue impulsada durante las giras técnicas que hicieron con la ayuda del proyecto local que tiene la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán. Conocieron el proyecto ‘Ganadería Colombiana Sostenible’ y el establecimiento de sistemas silvopastoriles (árboles distribuidos de manera estratégica en los predios). De esa forma reconocieron y entendieron que era necesario un cambio.

“Cuando Fedegán llegó a San Pedro hicieron una gira por algunas fincas del oriente antioqueño, a mi esposo y a mí nos gustó lo que tenían en un predio que se llama ‘Cien años de soledad’, entonces nos pusimos en contacto con la Umata (Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria) y dijimos que queríamos hacer eso”, asegura Alba. (Lea ‘Ganaderos de Acacías fomentan cultura innovadora’)

Desde hace dos años y medio esta pareja de esposos dieron rienda suelta a esa idea nunca antes vista en la región. “El reto más grande fue tomar la decisión porque nadie lo había hecho, porque son tierras frías y sólo hay kikuyo (un tipo de pasto), por donde quiera que mire sólo hay de eso”, y lo dice sacando ese espíritu aventurero que suelen tener los antioqueños. Suena fácil cuando lo explica.

Pero para tener los primeros resultados fue necesario escuchar la voz de expertos y empezar la renovación del predio de 18 hectáreas. “Separamos una franja de un metro de ancho, aislamos a ambos lados con una cerca para que el ganado no se comiera lo que sembramos y así los árboles cogieran fuerza e hicimos divisiones de potreros”.

Construyeron un nuevo sistema ambiental. Mejoraron la calidad de vida de las 64 vacas. Aumentaron el nivel de oxígeno de la región. La tierra es más fértil. Y la organización de ‘El Balcón’ es  evidente. (Lea ‘El pago por Servicios Ambientales para los ganaderos es una realidad’)

“Con esos árboles llegaron cucarrones que mueven la tierra, cogen los excrementos de las vacas los dejan en el fondo y mejoran la calidad de la tierra porque hay más alimentos para los animales. Es que el que se mete en la ganadería debe saber que antes de ser ganadero debe ser agricultor, porque los animales también comen. Si talan árboles, ¿entonces qué nutrición va a tener una vaca?”, enfatiza Alba Lucía. (Lea ‘FAO pide que se generen nuevas políticas para el sector agroforestal’)

“Al implementar en los potreros tilo y botón de  oro (plantas fuente de forraje), se proporciona una fuente de proteína importante para los animales y al tener árboles como Acacias y Eucaliptos las vacas tienen un área de sombrío, aireación en el suelo y madera, entonces una de las ventajas que tienen es la reducción de costos y le generan una vida más saludable a las vacas”, comenta Alejando Avendaño Sierra, profesional en Gestión de Proyectos Estratégicos de Fedegán.
 

La unión familiar, clave para el futuro de la ganadería
Tal vez sin proponérselo, Alba junto con su esposo están formando una generación de jóvenes promotores de la defensa y conservación del medio ambiente e igualmente disminuyendo la deserción en el campo. Su hijo mayor reside en Bogotá, estudia Ingeniería Civil y pretende regresar a San Pedro de Los Milagros para sembrar una semilla de lo aprendido y ser multiplicador de conocimientos. El menor aún está en el colegio.

“A ellos les gusta la ecología, los árboles y hoy en día quieren más la naturaleza. Les he enseñado a que hay que ser más integral en la producción de la vida, aumentando los niveles de oxígeno, sembrando comida para los animales y también para los seres humanos”, finalmente ellos serán los herederos de la ganadería sostenible que hay en ‘El Balcón’.

Finaliza diciendo que en Colombia “no hay tierras malas, sino mal manejadas”, lo dice con conocimiento de causa porque “manejar el concepto: -las plantas son seres vivos como las vacas y como yo- es muy difícil y no todo el mundo lo asume, pero si la gente escuchara y se dejara asesorar se daría cuenta que el ganado bien alimentado también paga”.

El Pago por Servicios Ambientales para los ganaderos es una realidad
 
Por: Fondo Acción
Fecha Inicio: Abril 4 de 2013
Fecha Cierre: Mayo 4 de 2013

‘La Felicidad’, como don Luis Patiño llama a su finca, hace honor a su nombre, pues este lugar es uno de los predios donde a pesar del intenso verano que azota a la Costa Caribe desde octubre, cuenta con árboles, agua y suelos verdes para las 19 vacas que sostiene.
 
Don Luis Patiño es propietario de la finca La Felicidad. Él hace parte de los beneficiarios del Proyecto de Ganadería Colombiana Sostenible.
Don Luis es uno de los beneficiarios del Proyecto de Ganadería Colombiana Sostenible que recibió pago por servicios ambientales correspondiente a línea de base. Según María Elena Santana, Coordinadora del proyecto por parte del Fondo Acción, “visitamos los predios para mirar cómo están. De acuerdo a lo que encontramos hoy, pagamos al ganadero los esfuerzos que ha hecho a la fecha por la conservación y el uso adecuado de los suelos”. Durante el mes de marzo de 2013 el Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible pagó más de $ 25 millones de pesos a un total de 68 fincas del bajo magdalena y la ecoregión cafetera, que tienen una cobertura aproximada de 1.600 hectáreas.
 
El equipo técnico del Proyecto de Ganadería Colombiana Sostenible asesora a don Fernando propietario de la finca El Porvenir en Piojo, Magdalena.
El propósito del proyecto consiste en que el ganadero haga cambios en el uso del suelo de su finca, con la asistencia técnica de un grupo de especialistas que lo orientan y recomiendan qué tiene que hacer y cómo hacerlo: qué árboles y arbustos hay que sembrar para alimentar a sus vacas, cómo deben rotar el ganado, que especies son favorables para su territorio, cómo proteger las fuentes de agua, cómo conservar la humedad en el suelo, cómo influye el clima en el desarrollo de su ganado, cómo aumentar la producción de carne y leche, cómo reducir costos de producción y agroinsumos, entre otros aspectos. Para don Luis, “la asistencia técnica del proyecto es excelente y he logrado cambios importantes en mi finca, si sigo así, en tres años va a producir mucha comida, no habrá derrumbes y tendrá el triple del ganado que tengo hoy”.

Estas prácticas se están contagiando en Colombia. “Mi vecino no está en el proyecto pero ya quiere hacer lo mismo que yo”, afirma don Luis. Este es un ejemplo para demostrar que vale la pena trabajar para transformar las fincas ganaderas en Colombia en paisajes más verdes y amigables con el medio ambiente.
 
Este es un ejemplo de banco de forraje, el cultivo de comida para el ganado.
Don Fernando, otro ganadero de Piojó-Magdalena, propietario de la finca El Porvenir, es consciente de las bondades de implementar buenas prácticas ganaderas. A diferencia de sus vecinos, menciona “somos agricultores y tenemos la costumbre de cultivar el alimento para el ganado, por eso nuestra finca, a pesar del verano, tiene buen alimento”.

Si bien el pago es un incentivo que no alcanza a cubrir todos los costos del ganadero para realizar los cambios en su predio, “lo que realmente les queda para toda la vida es el aumento en la productividad y por esto queremos animarlos a hacer todas las transformaciones posibles este año para lograr un pago mayor en el marco del Proyecto”, afirma María Elena Santana.

 
El Proyecto de Ganadería Colombiana Sostenible es una alianza entre el Fondo Acción, Fedegan, CIPAV, TNC y el Banco Mundial, comprometidos en transformar las prácticas ganaderas en acciones sostenibles en el tiempo.

Ganadería sostenible: la apuesta más rentable para su negocio
 
Por: Federación Nacional de Ganaderos FEDEGÁN
20 de Agosto de 2012
 

 
En el momento en que Alcides Batista Villanueva se enteró del Proyecto de Ganadería Sostenible, tendría la posibilidad de hacer más productivo su negocio sembrando árboles y mejorando las condiciones del entorno de sus vacas y toros.

Este campesino hace parte de los 1.000 ganaderos de cinco regiones del país, que en el mes de julio firmaron su contrato para transformar las fincas y hatos de los pequeños y medianos ganaderos de Colombia, haciéndolos más productivos y sostenibles en el tiempo, con la asesoría y el acompañamiento de los expertos más calificados del país.

Desde ahora los ganaderos podrán garantizar la comida de su ganado durante todo el año, aumentar la capacidad de carga y la producción de leche de sus vacas; lograrán además reducir los costos de producción de sus hatos, mientras mejora la calidad de los suelos y las fuentes de agua de sus predios.

Para lograrlo, los beneficiarios tendrán la mejor asistencia técnica permanente hasta el 2015, en la que cada mes contarán con un equipo de veterinarios, zootecnistas, ingenieros forestales, biólogos, geógrafos, entre otros, que visitarán sus fincas y le realizarán un seguimiento al proyecto para mejorar sus prácticas productivas y las condiciones ambientales de sus terrenos. Todo esto estableciendo un diálogo con los ganaderos para asegurar que sus procesos se fortalezcan. Según María Elena Santana, Coordinadora de Planeación y de Desarrollo, del Fondo Acción “este proyecto les va a brindar una asistencia permanente y a la vez pintará el paisaje de Colombia de verde. Otra de las ventajas a destacar es que aquí no estamos ensayando. El técnico será un apoyo qué le aportará un nuevo conocimiento para implementar su negocio”.

Así los ganaderos construirán cercas vivas, sembrarán árboles frutales y maderables en los potreros, harán rotación de ganado en los mismos para permitir que el pasto crezca, para evitar la erosión, para que haya comida fresca cada día, entre otras acciones. Las vacas necesitan sombra para su bienestar y al transformar terrenos secos en verdes parcelaciones, estos animales ganan peso más rápido y aumentan su producción de leche y carne. El señor Alcides, quien ya espera comenzar a trabajar para implementar mejores prácticas en su finca, anotó que “lo más importante de este proyecto de ganadería sostenible es la asesoría que nos van a brindar. Nos mostrarán cómo manejar nuestro ganado en una pequeña porción de tierra. Así uno puede lograr un mejor complemento entre la tierra y los animales”.