Mercagán que realiza la subasta ganadera de Santander todos los miércoles, la semana pasada negoció solamente el 27 % de su comercialización habitual.
El menor volumen de compra y venta se debió a que los animales no llegaron a la subasta como siempre sucede.
“Con los insumos incrementándose en 40 % al año y la leche decreciendo más del 30 %, estamos conminados a acabar el negocio porque es imposible hacerlo viable”, anunció Rómulo Cáceres, ganadero de Nemocón, Cundinamarca.
Para este ganadero que ve amanecer en la Sabana de Bogotá a sus vacas Jersey y Holstein desde hace más de 50 años, el manejo del negocio se volvió complejo ante el vaivén de los precios.
Hasta el pasado viernes, ya se habían sacrificado y enterrado más de 20 animales en la vereda Birri Birri, en el cañón del San Jorge. De acuerdo a los pobladores, es una zona de difícil acceso por lo cual todavía no se tiene claro cuántos bovinos más pueden estar infectados.
El tema de la extorsión en el sector ganadero es un problema que existe desde hace muchos años. Los productores se han visto sometidos por las bandas criminales, por delincuencia común y por la guerrilla.
Con miras a tener presente estas prácticas, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA), elaboró la cartilla “Bienestar animal en plantas de beneficio de bovinos y porcinos”.
Una tesis doctoral de la Universidad Nacional anunció que en Colombia en los últimos 39 años se registraron 396 mil casos de enfermedades zoonóticas, de las cuales 158 mil corresponden a casos reportados en humanos y 238 mil a casos reportados en animales.
César Augusto Gómez Velásquez, médico veterinario y magíster en Ciencias Veterinarias, explicó que las salpinges están descritas en el aparato reproductor de las mujeres y se conocen comúnmente como trompas de Falopio.
El pasado 8 de febrero, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural expidió la Resolución 083, por medio de la cual se establecen condiciones para promover las exportaciones de leche y derivados lácteos a partir de la producción de las Zonas Más Afectadas por el Conflicto (ZOMAC).
“Tratar de cerrar importaciones porque el mercado produce la leche que necesita y no requiere producto del extranjero”, propuso Filippo Rapaioli, director ejecutivo de Asosimmental.
Manifestó que si se abren más contingentes de importación el precio se va para abajo y lo que hacen las acopiadoras es comprar barato y reconvertir el producto.