En algunas regiones es más fuerte su impacto que en otras, pero lo que sí es cierto es que la producción de leche se disminuye –en algunos casos hasta un en 25 % o más–.
El verano afectado a las regiones que se encuentran en trópico bajo, es decir, a las de mayor temperatura. (Lea: En Sumapaz ganaderos de lechería abandonan el negocio)
Las hembras y los machos simmentales se caracterizan por ser corpulentos y con una capacidad de adaptación a las condiciones climáticas alta. Su habilidad para producir carne y leche al mismo tiempo, les ha permitido difundirse alrededor del mundo y tomar popularidad entre los trabajadores de la tierra.
Las heladas meteorológicas que ocurren en zonas de altiplano y de montaña en el país son ocasionadas por radiación, es decir, se deben al enfriamiento progresivo e intenso del suelo por radiación de su calor, produciéndose principalmente en las noches de cielo despejado que son típicas a comienzo del año.
Con estas recomendaciones se buscan paliar la caida en la producción de leche, carne y en la natalidad, generada por disminución en el consumo de forrajes y el stress calórico e hídrico.
El ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Andrés Valencia Pinzón, anunció la puesta en marcha de un programa de alimentación bovina, el cual cuenta inicialmente con $8.000 millones.
La medida se enmarca en la estrategia ‘Atentos con el Clima’ y tiene por objeto apoyar a los productores y mitigar los efectos negativos que les ocasionen las variaciones climáticas que se presentan al inicio del año, como las recurrentes heladas en departamentos como Boyacá y Cundinamarca y las altas temperaturas en otras regiones del país,
Ganaderos coinciden en que hay que apuntarle a la competitividad productiva para poder incursionar con mayor rentabilidad en los mercados de la leche y de la carne bovina.
Argumentan que no se puede ser competitivos con una producción en doble propósito en promedio de 3 - 4 litros de leche por vaca al día y con una carne sin marmóreo. Agregan que los productores medianos y grandes deben separar los hatos y especializarse. Señalan que se deben hacer ajustes en materia de genética para poder ofrecer los productos que demanda el mercado mundial.
La ‘Guía mejores prácticas para la producción lechera en el Clúster de Lácteos de Bogotá – Región’ es un instrumento práctico que brinda al productor lechero la oportunidad de revisar situaciones problemáticas cotidianas y contar con propuestas de solución, de tal forma que sean fácilmente implementadas en los predios lecheros de la región. (Lea: Avances y agenda 2020 del clúster de Bogotá)