Las plantas forrajeras también tienen su 'corazoncito'
Publicado por Fedegán on Wednesday, 14 July 2021
Existen dos factores ambientales que ejercen mayor influencia en el crecimiento de una planta forrajera: la temperatura y la humedad. De acuerdo a una investigación realizada por la Corporación colombiana de investigación agropecuaria (Agrosavia), es necesario conocer la respuesta fisiológica de cada especie a las condiciones ambientales para así formular un sistema de manejo. Al fin y al cabo las plantas también tienen su 'corazoncito'. (Lea: Así se puede proteger el suelo y agua en su finca)
Temperatura
Este factor influencia todos los procesos fisiológicos de la planta, teniendo en cuenta que los extremos de temperatura determina el rango de adaptación y la distribución de las especies, según lo menciona la investigación.
La temperatura óptima es distinta para las distintas especies, estados de desarrollo y parte de la planta. Generalmente para el desarrollo vegetativo es menor que la óptima para la floración y producción de semilla. También es menor para el crecimiento de la raíz que para el desarrollo de la parte aérea de la planta.
Las especies en zonas templadas parecen tener su temperatura óptima alrededor de 20°C, aunque pueden crecer activamente a temperatura mucho más bajas, mientras que para las especies tropicales el óptimo parece estar entre 30 y 35°C, produciendo muy poco por debajo de 15°C.
Efectos de altas temperaturas
De acuerdo con la investigación, bajo condiciones de alta temperaturas se registra un descenso en el contenido fructosano, una disminución en el contenido de sucosa y un aumento en los porcentajes de celulosa, lignina y pentosana, así como un porcentaje más alto de nitrógeno, además, una mayor proporción del nitrógeno se encuentra en forma soluble. (Lea: Consejos para cuidar al ganado ante la llegada de altas temperaturas)