Fertilización, clave en el rendimiento de las praderas
Publicado por CONtextoganadero.com on Friday, 6 May 2022
Así lo planteó Ricardo Arenas, médico veterinario especialista, en un capítulo del Manual Práctico Ganadero elaborado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), donde indicó que los requerimientos nutricionales varían entre los diferentes forrajes. Por ejemplo, en trópico alto la alfalfa demanda una gran cantidad de nutrientes, mientras que el kikuyo puede tolerar mejor los suelos pobres.
En trópico bajo ocurre lo mismo, mientras el pasto mombasa o los forrajes híbridos, generalmente requieren de buenas condiciones nutricionales, las brachiarias como la humidícola crecen en buena forma sobre suelos más pobres.
A su vez, las leguminosas forrajeras al asociarse con microorganismos del suelo transforman el nitrógeno atmosférico en compuestos de nitrógeno que incorporan al suelo y pueden ser utilizados por las pasturas. (Lea: ¿Aplica usted las buenas prácticas de fertilización?)
Sin embargo, la fijación biológica del nitrógeno requiere de otros nutrientes esenciales que pueden encontrarse de forma deficiente en los suelos como es el caso del fósforo, el potasio, el sodio y el hierro, entre otros.
Por lo tanto, incluso en mezclas con leguminosas las pasturas requieren de fertilización para obtener el máximo beneficio.