La devaluación del peso colombiano frente al dólar generó varios efectos negativos en la economía del sector pecuario del país. Los insumos, medicamentos, agroquímicos y hasta maquinarias que otrora se adquirían en el exterior a precios favorables, pasaron a ser artículos muy caros que impactaron negativamente los costos de producción de los ganaderos.  

 

A ese fenómeno se le sumaron las exportaciones de animales en pie que adelantó Colombia durante 2016, hecho que disparó los precios de los semovientes a niveles históricos y nunca antes vistos y que generó preocupación en algunas regiones por el desabastecimiento de ejemplares en lugares como Cauca. (Lea: Contrabando desde Cauca hacia Ecuador preocupa al sector)

 

En el suroccidente de Colombia, los departamentos limítrofes vivieron un año particular, no solo tuvieron que soportar los altos precios de los insumos y el de los animales, sino que los productores empezaron a vender de forma masiva sus ejemplares a productores del Ecuador para sacarle provecho a la devaluación del peso.