¿Cómo se diagnostican las alteraciones endocrinas en rumiantes?
Publicado por Fedegán on Thursday, 6 January 2022
Un trabajo de la Universidad de Manizales (Colombia) señaló que las concentraciones en base materia seca (MS) del selenio en el forraje deben ser superiores a 0,1 ppm, pues cuando son menores a 0.05 ppm provocan daño a la salud y disminuyen la producción.
Para el caso de yodo se considera una concentración inferior a 0,2 ppm como deficitaria, entre 0,2 y 0,4 ppm como marginal y superior a 0,4 ppm como adecuada, precisaron los autores del artículo. (Lea: ¿Qué puede producir el hipotiroidismo en sus vacas y ovejas?)
En consecuencia, cuando las concentraciones en el forraje de uno o ambos minerales son bajas, predisponen a la disminución de concentraciones de las hormonas tiroideas. Si la hormona T4 tiene una concentración menor al rango de referencia, se confirma la alteración endocrina.
Este artículo recordó que cuando hay un daño de la glándula tiroides, la T4 es la hormona más apropiada para evaluar su funcionalidad. De hecho, se pueden encontrar niveles “normales” de T3 y niveles bajos de T4 en animales con hipotiroidismo.
“Las concentraciones séricas de T3 son un pobre indicador de la función de la glándula tiroides por la localización predominante de T3 dentro de las células, la cantidad mínima secretada por la glándula tiroides y la secreción incrementa por esta cuando hay un daño progresivo de la glándula”, indicaron.
Para un diagnóstico de hipotiroidismo se evalúa la TSH endógena. Si la TSH esta aumentada, indica hipotiroidismo primario, pero si la TSH esta baja, indica que es secundario o terciario. (Lea: Suministrar poco yodo a la vaca en preñez ocasiona la muerte del feto)