¿Por qué el pastoreo en franjas podría ser más productivo? (parte 2)
Publicado por Fedegán on Tuesday, 15 March 2022
Ortiz y Silva (2006) explicaron en el artículo “Cálculo y manejo en pastoreo controlado. II) pastoreo rotativo y en franjas” que es en esencia un pastoreo rotativo ideal donde la superficie de las parcelas (franjas) y el tiempo de estadía en ellas es muy breve.
Según ellos, la gran diferencia con el pastoreo rotativo convencional es que este último presenta un número menor de parcelas y por lo tanto un mayor período de permanencia en cada una de ellas. (Lea: Ganadero, ¿cuál de estos sistemas de pastoreo emplea usted?)
A su vez, el ingeniero agrónomo Marcelo Pereira Machín argumentó en la Revista Plan Agropecuario que esta técnica es una de las formas de “aprovechar el enorme potencial” que ofrecen los mejoramientos y con múltiples ventajas para el ganadero.
Mayor producción y calidad del forraje
El experto comenzó anotando que “cuanto más frecuentes e intensos son los pastoreos, menor será el rendimiento total acumulado”. De esta afirmación se desprende el hecho de que es importante formar reservas pero no solo para hacerlas sino para utilizarlas.
A su juicio, la clave radica en saber administrarlas pues como aseguró más adelante en el artículo “muchas veces no pastorear las plantas es más perjudicial que hacerlo”. (Lea: 7 razones por las que el pastoreo favorece un futuro mejor)
Este sistema determina una mayor producción de forraje debido al hecho de que en definitiva se respeta el funciona miento fisiológico de la planta, lo que determina que a lo largo del año se obtenga una mejor calidad de los pastos.
Dado que todos los días se enfrentan a una oferta de forraje nueva, se produce lo que algunos llaman “efecto serrucho”, esto es, que en potreros grandes la ganancia al principio es alta y a medida que pasan los días en ese potrero comienzan a disminuir, hasta que se cambia de potrero donde nueva mente comienzan a ser altas y así sucesivamente.