Los ganaderos deben estar muy atentos cuando una vaca entra en calor, pues la oportunidad de preñarla es muy reducida. Una vez ocurre este fenómeno, el productor dispone de hasta 24 horas para inseminar la res, aunque el tiempo ideal son 12 horas.

 

Andrés Sinisterra, médico veterinario, explicó que esto se debe a los cambios que sufre el animal cuando comienza el celo. (Lea: 3 métodos para sincronizar los celos en vacas)

 

“En este periodo, una vaca genera mucho calor, por lo que se vuelve más activa e inquieta. Cuando calienta el sol en las mañanas, sobre todo en trópico bajo, ponerse en calor incrementa más su temperatura interna, entonces la gran mayoría tiene celos silenciosos o nocturnos”, señaló.

 

Teniendo esto en cuenta, el experto dio una serie de recomendaciones para detectar el celo durante la noche. La primera de ellas es enseñar al vigilante o la persona que cuida el ganado cuáles son los síntomas o signos que evidencian el inicio del estro.