Así pues, mientras que los primeros 10 meses del año pasado presentaron caídas de hasta 46 millones de litros de leche entre un mes y otro, en noviembre se recolectaron 277 millones, casi 9,3 millones más que un año antes, de 267,8 millones.

Si bien no se trata de una noticia alentadora para el sector, por lo menos evidencia que hubo un mayor esfuerzo tanto de productores como de la industria en la compra formal del lácteo. (Lea: Precio de leche ha aumentado en la sabana de Bogotá por baja oferta)

Este resultado sumado a una menor reducción en octubre ubicó la variación trimestral en 1,44 %, luego de 4 trimestres negativos que incluyen el último de 2018 y los tres primeros de 2019, con diferencias preocupantes: -9,3 % en el primero, -14,2 % en el segundo y 5,44 % en el tercero.

Aun cuando estas mayores reducciones se deben a que el 2018 registró una excelente producción y acopio, que culminó con un récord de 3.146 millones de litros comprados en el mercado formal, es lamentable que la tendencia no se haya mantenido a lo largo del siguiente año.