La advertencia que hizo el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, en septiembre del año anterior es clara: “aquellos productores de más de 1.000 animales destinados al sacrificio para consumo humano, tienen un plazo de 12 meses para cumplir con las condiciones sanitarias y de inocuidad en sus predios, establecidas”. 

 

Esos requisitos que deben cumplir los ganaderos hacen parte de los compromisos que tiene el sector primario con el Decreto 1500 de 2007. La idea es que el Instituto les expida a aquellos empresarios que cumplen con la normatividad una autorización, así se comprueba que las actividades que se adelantan en los predios cumplen con prácticas de calidad y garantizan alimentos sanos e inocuos, es decir, que no representan un riesgo para la salud de los consumidores finales. (Lea: Ganaderos también tienen obligaciones frente al Decreto 1500)

 

Para que la entidad emita dicho certificado, un funcionario del ICA, previa solicitud del ganadero, irá al predio para verificar las instalaciones, áreas de producción primaria, saneamiento, sanidad animal, bioseguridad, buenas prácticas en el uso de medicamentos veterinarios, buenas prácticas para la alimentación animal, bienestar animal y personal de trabajo.

 

Pese a la importancia del procedimiento, dirigentes aseguran que la entidad ha hecho poca divulgación y promoción entre los productores para obtener la autorización sanitaria, por lo que es necesario trabajar más en ese aspecto ante el poco tiempo que queda para tramitar dicho documento. (Lea: Iragorri sigue delegando funciones al ICA a pesar de escasos avances)