Como lo señala un artículo de la Extensión Penn State, cada porción del tracto digestivo debe tener una barrera segura para mantener a los microbios dentro del tracto. Cuando un animal tiene una barrera fuerte, se considera que goza de buena salud intestinal.

Cuando la barrera es débil, los microbios o patógenos pueden salir del tracto digestivo y entrar en el cuerpo / torrente sanguíneo, lo que puede causar numerosas enfermedades. (Lea: Así podría presentarse la acidosis del intestino grueso en sus bovinos)

A su vez, el portal Nutrición Animal detalla que la principal función de la integridad intestinal es mantener la estructura de la barrera para que pase desde la luz intestinal (el espacio interior del intestino) hacia el organismo del animal solo lo necesario.

Con esto se evita la absorción de elementos indeseables como patógenos, toxinas, alimento indigerido, así como también la disbiosis, que es la alteración del correcto equilibrio de la microbiota, que sufre cambios continuos con la mucosa.

Además, cerca del 70 % las células del sistema inmune están en el intestino, lo que facilita una buena respuesta inmunitaria, así como gran parte de la producción de hormonas, sobre todo las relacionadas con la absorción y digestión de nutrientes.

Una barrera intestinal íntegra permite que el animal desarrolle todo su potencial genético al absorber los nutrientes, así como también previene la aparición de enfermedades. (Lea: ¿Cuándo utilizar los prebióticos, probióticos y simbióticos?)