La transición de esquemas de producción de ganadería extensiva a sistemas silvopastoriles (SSP), es decir, la integración de árboles con arbustos ramoneables con el pastoreo de animales, ha arrojado resultados sorprendentes y altamente benéficos para la rentabilidad de la actividad ganadera y para el medio ambiente.

Así lo demuestra Fedegán, que a través del programa Ganadería Colombiana Sostenible (GCS), comenzó esta gestión en el año 2005, en donde alcanzó una cobertura de 4100 predios con 160 mil hectáreas.

La incorporación de especies arbóreas les ha permitido a los ganaderos que participaron en dicho programa, incrementar en 10 años hasta 3 veces la producción de leche, 1.5 veces la forrajera y 5 veces la carga animal por hectárea.

En conjunto estos ganaderos –que pasaron de tener un sistema tradicional de producción a un sistema silvopastoril intensivo (SSPi)– mejoraron sustancialmente su competitividad lechera, pues la producción aumentó de 794 a 2850 litros por hectárea al año.

La productividad forrajera, pasó de 15.638 a 23.479 kilogramos de forraje verde por hectárea.

La carga animal, que es un indicador por excelencia del uso productivo del predio, pasó de 1,2 a 5,2 UGG (Unidad de Gran Ganado) por hectárea en SSPi.

Desde el punto de vista de la captura de carbono, cerca de un millón seiscientas mil toneladas de dióxido de carbono han sido removidas de la atmósfera gracias al Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible (GCS) en los 10 años.