En los últimos días ha circulado el video de los restos que quedaron del ejemplar de la Ganadería La Pizarra, ubicada a 2 km del casco urbano de Montería. Sin embargo, esta escena no es nueva para los productores vecinos que han visto cómo se repiten estos casos cada cierto tiempo.

“En la finca de al lado hicieron lo mismo. Se ve siempre el robo de reses, carneros, hay una banda de cuatreros que no lo hacen todos los días o todas las meses, pero sí lo hacen cada mes o cada mes y medio”, denunció Juan Pablo Agudelo, dueño de la ganadería.

Su empresa está dedicada a la cría de ganado gyr y gyrolando, trabajando con embriones nacionales e importados de la más alta calidad genética. (Lea: El abigeato o robo de ganado: “delito promovido por la expedición de normas legales centralistas”)

"Sorprende que lo hayan podido hacer porque el toro no era dócil, no era fácil de manejar, tenía 700 kg. (…) Se ha murmurado que hay personas que ya las han capturado pero las sueltan. Además, el animal fue desollado de forma perfecta, el desposte pareció haber sido hecho en una sala de sacrificio”, manifestó.

El ganadero argumentó la existencia de una red delincuencial porque se llevaron 300 kg de carne que tuvieron que venderse rápidamente. Pero además señaló que no solo afectan a ganaderías especializadas, pues a un productor le mataron uno de los dos únicos animales que tenía.

“Cuando uno empieza a publicar esto, empiezan a llegar mensajes de vecinos del sector que denuncian que les pelaron animales. Los mismos carabineros me contaron que un campesino tenía 2 vaquitas y le pelaron una, y el hombre lloraba”, reveló Agudelo.

Por ello sugirió a los carabineros que atendieron su denuncia que se refuercen los controles en los expendios, porque cuando los delincuentes roban esa cantidad de carne saben quiénes se la van a comprar. (Lea: El abigeato se ha convertido en una “mafia”, asegura productor)