El informe de inventarios de leche en polvo, quesos madurados y leche UHT (entera, descremada, semidescremada y deslactosada) reportado por los agentes compradores de leche cruda a la USP dio cuenta de un total de 5677 toneladas de leche en polvo acumuladas hasta el 30 de junio.

De estas, 2266 corresponden a leche en polvo descremada, cifra cercana al promedio de lo que va corrido de 2022 que corresponde a 2262 t. Las otras 3411 t son de leche en polvo entera, un dato que sí es mucho menor al promedio semestral de 4531 t.

Comparado con el registro del cierre de 2021, el inventario de leche en polvo descremada es 161 % más alto, en tanto que el de leche en polvo entera bajó 35,7 %. (Lea: Industria acumuló más de 7000 toneladas de leche en polvo en diciembre en 2021)

Comparado con el mismo mes del año pasado, el stock de leche descremada es 83,7 % es más alto que el de junio de 2020. No se puede comparar con el último año de normalidad, que fue el 2019, porque en ese momento no se llevaba registro de este producto.

En cuanto a la leche en polvo entera, es 69,7 % menor al de junio de hace 2 años, y 54,1 % más bajo que el de junio de 2019. Estas cifras contrastan con las altas cantidades de leche en polvo importadas este año, más de 30 500 toneladas hasta mayo.

Esto sugeriría que las empresas han gastado la mayor parte del producto importado y que apenas han aguardado unas pocas reservas, por lo cual tendrían que volver a recurrir a la leche sólida si en las próximas semanas o meses se presenta escasez de leche líquida.