El 2015 ha sido uno de los años más complicados para los productores bovinos colombianos. El Fenómeno de El Niño ha sido el principal causante de los dolores de cabeza que aún padecen los empresarios pecuarios nacionales. (Lea: 5 aspectos a tener en cuenta durante la trashumancia)

 

A eso se le suma la falta de agua, el aumento en los costos de los insumos, la devaluación del peso, la disminución al precio del litro de leche, hechos que han afectado la ganadería colombiana en este 2015. Sin embargo, ante el tema climático, los dueños de los semovientes han apelado a 2 estrategias: disminuir la carga animal o movilizar animales a zonas con mejores condiciones.

 

Esa última alternativa ha sido la más utilizada por los ganaderos colombianos. Según cifras del Fondo Nacional del Ganado, FNG, al 15 de diciembre del año en curso, 673 mil 28 bovinos tuvieron que ser movilizados de sus predios ante la escasez de forrajes, agua y alimentos necesarios para vivir. Los departamento que lideran esa estadística son Sucre (253 mil 345), Magdalena (140 mil 234) y Bolívar (139 mil 424).