Solamente en agosto de este año se reportaron 293 mil 391 cabezas enviadas al frigorífico, una cifra similar al mismo mes de 2018, que fue de 293 mil 382. Al contabilizar todo el 2019, iban 2,25 millones de bovinos, un 1,7 % menos en comparación con el año inmediatamente anterior.

La cifra del octavo mes representa un alza frente a los poco más de 282 mil de 2017, pero está muy lejos de las casi 358 mil que se registraron en agosto de 2012, lo que confirma la tendencia en declive de los últimos años. (Lea: Beneficio legal de vacunos repuntó levemente en julio)

De igual manera, las 2,25 millones de cabezas de los primeros 8 meses de 2019 están más cerca de las 2,29 millones de 2018 y las 2,23 millones de 2017, que de las 2,74 millones de 2012, mostrando una cifra cercana a los 500 mil animales que se han dejado de consumir en los últimos 7 años.

A 4 meses de culminar este año, es probable que el número de reses sacrificadas sea menor a las 3,5 millones como ha pasado en los 2 últimos años, y no se ubique por encima de los 4 millones como se registró en 2012 o 2013.

Como lo ha explicado CONtexto ganadero, las razones de este declive van desde el aumento del contrabando y el sacrificio clandestino, así como la implementación del Decreto 1500 y el cierre de varias centrales. (Lea: Sacrificio bovino: baja número de cabezas pero sube rendimiento en canal)