Desde hace varias semanas, el sector rural en varios municipios de los 3 departamentos que hacen parte del Eje Cafetero ha estado en alerta por las fuertes precipitaciones.

 

El Ideam ha mantenido la alerta roja en Caldas y Risaralda por las crecientes súbitas o deslizamientos de tierra, mientras que Quindío mantiene la alerta amarilla. (Lea: Invierno causa estragos en ganaderías colombianas)

 

 

Olga Martínez, ganadera ubicada en la vereda Gallinazo del municipio de Villamaría, contó que los inconvenientes más graves se deben a los derrumbes en la vía que conduce al sector municipal.

 

“A los propietarios de las fincas nos ha tocado mandar a quitar la tierra porque de la Alcaldía no nos colabora para nada. Estamos azotados por el invierno, se nos ha mermado la producción en un 20 %”, aseguró.

 

Aunque el aporte para arreglar la carretera varía de acuerdo al deterioro, Martínez indicó que paga entre $300 y $400 mil para no interrumpir el tránsito de los camiones. (Lea: Producción láctea disminuye en lugares afectados por el invierno)

 

En efecto, las vías son las que más daños han sufrido por el intenso invierno. Patricia Jaramillo Henao, presidenta del Comité Lácteo de Caldas, afirmó que los corredores del norte y oriente del departamento son las más afectadas.