Según el Decreto 1500 de 2007 y las resoluciones reglamentarias, los establecimientos acondicionadores también son distintos a los expendios y son vigilados por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima).

Estos cuartos funcionan con menos exigencias que los frigoríficos para ser habilitados por la entidad, pero también deben cumplir los requisitos para obtener la autorización sanitaria. (Lea: Hay más de 180 mataderos de bovinos cerrados en 1er trimestre de 2020)

En materia de infraestructura y funcionamiento, tanto alrededor como al interior de la planta, deben cumplir con estándares que garanticen la inocuidad del producto, en materia de localización, accesos, sistemas de drenaje, iluminación, entre otros.

Por ejemplo, las vías de acceso deben estar limpias y en buen estado, al igual que las zonas de cargue y descargue, con superficies tratadas y duras que eviten el levantamiento del polvo, con declives y drenajes para que no estén obstruidas por desechos.

Las instalaciones deben ser cerradas y sólidas, para impedir el ingreso de plagas, y deben contar con acabados en material sanitario que se mantengan en buen estado. El diseño de las salas debe ser unidireccional y en secuencia lógica del ingreso hasta el despacho.