CONtexto ganadero revisó los diversos aspectos que hicieron parte del estudio sectorial de la Contraloría General de la República preparado por la Delegada para el sector agropecuario, en donde puso de presente la grave crisis que afronta el rubro bovino, particularmente en zonas como la Región Caribe. (Lea: ¿Ha caído la participación de la ganadería en la economía?)

 

Entre los aspectos que le preocupan a la CGR y los lleva a catalogar el panorama como “una de las peores crisis”, están el estancamiento del consumo de carne bovina, los pocos avances que se han tenido en la identificación del hato ganadero, el escaso dinamismo de las exportaciones de productos cárnico, y la preocupante forma como cada vez más la ganadería bovina pierde participación en la economía nacional.

 

Según el informe develado por el órgano de control, el consumo de carne bovina desde 2006 se estancó en un promedio de 18 Kg/persona, lo que es muy inferior a los 32 Kg de pollo y al aumento progresivo de la demanda de  carne de cerdo que pasó de 3,3 kg en el 2005 a 9,4 Kg en el 2017.