Si bien la glositis ulcerativa bovina no repercute mayormente en la economía del establecimiento afectado, por sus síntomas clínicos y patología en lengua, se encuadra en los cuadros clínicos epidemiológicos considerado en un diagnóstico diferencial de la fiebre aftosa, se lee en un documento de la revista veterinaria de Uruguay.

Esta patología se considera de etiología traumática en la mayoría de los casos estudiados, pues consiste en una lesión ulcerativa en la cara dorsal de la lengua del bovino, con una ubicación preferente en la protuberancia donde se localiza la papila gustativa. (Lea: Lengua, órgano vital para la productividad de las reses)

En este orden de ideas, la glositis ulcerativa crónica es una enfermedad que tiene muy poca descripción a nivel mundial, posiblemente, como dicen los expertos en la revista, “debido a que no tiene mayor gravedad”.

Esta patología forma parte de los cuadros que se consideran en un diferencial de enfermedades confundibles con fiebre aftosa, aun cuando no es una estomatitis, que por definición corresponden a aquellas patologías que producen inflamación de la totalidad de la cavidad oral, pero sí una glositis al afectar la lengua.

En la investigación se dice que la clínica y la epidemiología, describe a la glositis ulcerativa bovina, como una afectación a los bovinos en establecimiento, teniendo una mayor incidencia en el ganado en producción de leche, aunque se han visto casos en ganado destinados a la producción de carne.