Las casas comerciales ofrecen la semilla del pasto Piatá, una variedad de B. brizantha que se adapta sobre todo clima cálido y templado y puede llegar a producir entre 10 a 16 ton/ha por año de materia seca. (Lea: Conozca las diferencias entre los pastos anuales y perennes)

 

Sergio Mejía, investigador PhD en el área de pasturas y forrajes en el C.I. Turipaná de la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Corpoica, explicó algunas de las características de este forraje.

 

“Entró hace pocos años a Colombia, impulsado por Fedegán. Es un pasto de crecimiento erecto para suelos de mediana a buena fertilidad bien drenados, con precipitaciones mayores de 900 mm, puede presentar alturas de más de 1 m, aunque es de menor altura comparado con la brizantha Toledo”, precisó.

 

Por el contrario, tiene mejor calidad nutricional que este último, es altamente tolerante en épocas secas, puede ser empleado para producción de carne o leche y llega a ser resistente al mión de los pastos. (Lea: Brizantha, el pasto que le salva la vida a los ganaderos del trópico bajo)

 

“Pero en la época de sequía, puede presentar fuertes ataques de blissus, un insecto que chupa la savia de la planta y la seca, especialmente cuando hay escasez de agua”, aseguró el experto en forrajes de Corpoica.

 

Por su parte, Mauricio Sotelo, investigador en el programa de forrajes tropicales del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), contó que se han hecho trabajos en la entidad para evaluar el pasto Piatá.