De acuerdo con los médicos veterinarios Luis Antonio Amaya Melendez y Wendy Lorena López Hernández de El Salvador, el cruzamiento es una unión entre una hembra de una raza y un macho de otra para aprovechar las características de uno o de ambos, y lograr un mejoramiento de los hijos.

 

El apareamiento entre individuos resulta en una heterocigosis, que consiste en la incorporación al patrimonio genético de la descendencia, cualidades y aptitudes existentes en otra. (Lea: Estos son algunos de los sistemas de cruzamiento bovino más utilizados)

 

Los cruzamientos se clasifican en 2 formas, de acuerdo a sus objetivos, bien sea genéticos o sistemáticos con fines comerciales, que a su vez se dividen en cíclicos o permanentes.

 

 

Estos se dividen en absorbentes, intercurrentes o para producir una raza sintética o compuesta. Los primeros consisten en reemplazar una población animal mediante el cruzamiento sistemático de la descendencia hembra, utilizando reproductores puros.

 

Así, la cría va adquiriendo características de los animales puros, y pasa de media sangre F1 a 3/4, luego 7/8, hasta llegar finalmente a un ejemplar puro por absorción en la cuarta generación. (Lea: Esquema de cruzamiento, la ruta para tener bovinos de cierta sangre)