La carne que protege el cerebro y está aliada contra el envejecimiento

Lo primero: igual que no es admisible que nos den gato por liebre, debemos exigir que, si pedimos buey, no nos pongan vaca, más o menos vieja. No tenemos nada en su contra, pero dado que el buey se cotiza (y se paga) caro, lo suyo es disfrutarlo como debe ser, certificado y garantizado.