ntes del ciclo de negociaciones con el ELN en Cuba, merece la pena revisar su soporte jurídico, la Ley 2272 de 2022, por la cual “… se define la política de paz de Estado”. No es un tema menor, porque en ella se autoriza al Gobierno a adelantar “Negociaciones con grupos armados organizados al margen de la ley con los que se adelanten diálogos de carácter político…”, una definición que tiene mucho que ver con la autopercepción del ELN y con el alcance del cese al fuego. más›
Hace diez años –febrero de 2013–, usé este título en una de mis columnas, cuando las negociaciones con las Farc sufrían su primer tropiezo por el secuestro de dos militares, y Márquez le comunicaba al país que ellos tenían derecho a capturar miembros de la Fuerza Pública como ¡prisioneros de guerra! más›
En el Acuerdo de México quedó clara la prioridad que el ELN le otorga a la participación de la sociedad en la construcción de la paz, que no es solo el primer punto de la agenda, sino “el corazón” del proceso; una prioridad entendible, teniendo en cuenta el trasegar político de ese grupo, que se arrogó la condición de defensor armado de la sociedad. más›
Armado de prudencia, confianza y buena fe, y con el ánimo de servirle a la paz de Colombia, aunque fui declarado su enemigo, me he sentado en la mesa de negociaciones con el ELN más›
Nos despedimos de México dejando una agenda acotada para iniciar los temas sustantivos de las negociaciones con el ELN. Fue una etapa no exenta de debates a veces circulares, pero estamos allí, precisamente, para intentar “encontrarnos” y encontrar también salidas en lo “fundamental”; para buscar ese acuerdo Nacional que fue razón de vida para Álvaro Gómez y sigue siendo una urgencia nacional. más›
No se pueden entender las negociaciones entre el Gobierno y el ELN, si no está siempre presente su razón de ser, porque la paz no es un intangible, sino un bien público materializado en “la gente”, que en los campos espera liberarse del yugo que imponen los violentos para garantizar el control territorial que sostiene sus rentas ilícitas, y en las ciudades está a merced de las bandas del microtráfico. más›
Que nadie lo dude, FEDEGÁN cumple lo firmado. Los ganaderos cumplimos, como en 2009, cuando logramos certificar al país como libre de fiebre aftosa y cuando recuperamos ese estatus en 2020, después de una administración irresponsable que perdió ese gran logro y otros tantos. Cumplimos en la pandemia y seguimos cumpliendo, a pesar del abandono, la violencia y las narrativas que nos estigmatizan. más›
Un anónimo maestro rural, en Labranzagrande, Boyacá, vereda Guayabal-Cueta, confinado en una escuela desvencijada y sin servicios, viviendo y durmiendo solitario en lo que también es salón de clase, el día que colapsó su contacto con la modernidad, un panel solar, decidió pedir ayuda y decir “Aquí estoy, también soy colombiano”, pensando más en sus cinco alumnos que en su bienestar, para que, en sus palabras, “en un futuro sean personas que le sirvan al país”. más›

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